Escrito por: Long Yue
Fuente: Wall Street Journal
La selección del próximo presidente de la Reserva Federal está entrando en su fase final. Aunque Kevin Hassett, director del Consejo Económico Nacional de la Casa Blanca, se encuentra actualmente en la delantera, la decisión de Trump de iniciar una última ronda de entrevistas indica que el candidato final está lejos de ser «algo seguro».
Hoy, según informaron tres altos funcionarios del gobierno de Estados Unidos al Financial Times, Trump y el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, planean reunirse este miércoles con el exmiembro de la Fed Kevin Warsh. Este movimiento marca el inicio formal de la última ronda de entrevistas para encontrar un sucesor del actual presidente, Jerome Powell.
Este último desarrollo indica que la nominación de Hassett no es una certeza. Además de Hassett y Warsh, la lista final de candidatos incluye a otros dos finalistas entre los cuales se encuentran el gobernador de la Fed Christopher Waller, la gobernadora Michelle Bowman y el ejecutivo de BlackRock, Rick Rieder. Se espera que la decisión final se anuncie a principios de enero del próximo año.
El impacto central de este cambio de personal radica en la futura dirección de la política monetaria. Algunos inversionistas de Wall Street ya han expresado su preocupación, argumentando que Hassett, quien tiene una relación cercana con el presidente, podría ser demasiado agresivo en la reducción de tasas de interés, lo que representaría un riesgo potencial para los mercados.
Hassett va primero, pero su mandato podría tener variaciones
En las últimas semanas, Hassett se ha convertido en el favorito para suceder a Powell. Sin embargo, funcionarios del gobierno de Trump han planteado la idea de que Hassett ocupe el cargo de presidente de la Fed por un período más corto (que el mandato normal). El mandato regular del presidente de la Fed es de cuatro años y puede ser renovado.
Otras dos personas familiarizadas con el asunto afirmaron que el propio Hassett le propuso a Mnuchin que ocupara el puesto de Powell en la junta de gobernadores de la Fed, cuyo mandato termina en enero de 2028. Esta flexibilidad en la disposición deja espacio para futuros arreglos de personal.
Mnuchin aún podría hacerse cargo de la Fed
El secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, juega un papel clave en esta selección. Según los funcionarios, presentó a la Casa Blanca una lista con los nombres de cuatro personas, entre las que se encuentran Hassett y Warsh. Aunque Trump ha expresado en múltiples ocasiones públicamente su deseo de que Mnuchin ocupe el cargo de presidente de la Fed, Mnuchin mismo ha declarado que no está interesado en el puesto.
Sin embargo, si el mandato de Hassett se acorta, esto podría allanar el camino para que Mnuchin tome el control de la Fed más adelante en un segundo mandato de Trump. Este arreglo potencial sugiere consideraciones estratégicas a más largo plazo que podrían estar detrás de la selección actual.
Preocupaciones del mercado y la respuesta de Hassett
La posición de liderazgo de Hassett ya ha generado inquietud entre algunos inversionistas de bonos. Según los informes, estos inversionistas le expresaron al Departamento del Tesoro su preocupación de que Hassett podría reducir las tasas de interés de manera agresiva. Consideran que si esta medida lleva a una inflación persistentemente alta, podría sacudir el mercado de bonos del Tesoro de Estados Unidos, valorado en 30 billones de dólares.
Para aliviar las dudas del mercado, Hassett intentó recentemente enfatizar la importancia de la independencia del banco central. En un evento el martes, declaró que, aunque cree que aún hay espacio para recortes adicionales de tasas, el «trabajo más importante» del presidente de la Fed es «centrarse en los datos económicos y evitar involucrarse en la política».
Todo el proceso de selección se desarrolla en el contexto de las largas críticas de Trump al actual presidente, Powell. Durante el último año, Trump ha criticado continuamente a Powell por no reducir los costos de endeudamiento de manera más rápida y contundente. El mercado espera ampliamente que la Fed anuncie este miércoles un recorte de tasas de 25 puntos básicos, llevando el rango meta de la tasa de fondos federales a entre 3.5% y 3.75%, su nivel más bajo en tres años.
Aun así, Trump sigue pidiendo públicamente que los costos de endeudamiento de Estados Unidos se reduzcan a un nivel del 1%. Para cualquier nuevo presidente, encontrar un equilibrio entre las expectativas del presidente y mantener la independencia del banco central será un desafío enorme.